Cada año realizamos nuestra Cena Pan y Vino.
La relevancia y el valor simbólico de la Cena Pan y Vino la han convertido en una de las actividades centrales para trabajar por la Solidaridad, un valor por el cual nuestro santo chileno, Alberto Hurtado, lucho en favor de los más pobres entre los pobres.
Este valor reviste especial importancia en los actuales tiempos, y todos debemos cultivarlo.
La solidaridad es compartir con los que más necesitan. No solo bienes materiales, sino sentimientos, compañía y se expresa en esta mesa donde no sobra nadie. Felipe Cubillos expresaba en su trabajo en la Fundación Desafío Levantemos Chile, que no había nada mas solidario que ser eficientes. En la entrega al otro debemos ser eficientes para realmente lograr el objetivo de ir en ayuda de esos que nos necesitan.
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